Aprenda Debatiendo. Primera Parte.
Cuestiones en torno a la Web 2.0 y a la educación.
La Web 2.0 marcó un hito sorprendente en la era de las comunicaciones porque, más que hablar de la incorporación de unas nuevas tecnologías, hablamos de que la Web 2.0 marcó una nueva actitud de entender la Internet y la comunicación a partir de esta. Cuando la Web 1.0 hizo su aparición la comunicación se trataba tan sólo de una comunicación solitaria. La Internet era como cuando uno iba solo a consultar un libro en una biblioteca.
Con la Web 2.0 la actitud es diametralmente opuesta. Se trata de cómo las personas pueden crear conocimiento (que va enriqueciendo la Web), y sobre todo, lo hacen intercomunicándose entre sí. Lo cual representa una ampliación social y plenamente democrática del conocimiento y la cultura.
Bajo esta óptica vamos a considerar las cuestiones propuestas por la guía.
1. ¿Qué se entiende por inteligencia colectiva?
Podemos entender por inteligencia colectiva el hecho que en la nueva era virtual, el conocimiento es algo que no es creado únicamente por un personal altamente calificado en lo técnico, sino por todos en general. La Web 2.0 en particular permite no sólo que todos podamos participar en la creación de conocimiento, sino que lo hagamos de una manera colaborativa, democrática y estructurada.
Una de las características del conocimiento es que este se organiza categorialmente y un caso ejemplar de esto es cómo se muestra y categoriza la información que se encuentra en la red. Según el texto Tendencias de la Web 2.0 aplicadas a la Educación en línea de Pedro Hernández, en la época de la Web 1.0, eran los editores de la información en las páginas web quienes clasificaban la información de una forma casi exclusiva.
Posteriormente, con los motores de búsqueda avanzados, como Google, esta categorización se hizo más fácil e intuitiva, pero conservaba un problema: sus criterios seguían siendo en gran medida los mismos. Mediante la Web 2.0 la creación y categorización del conocimiento ya no están sujetas a cuestiones como cuál sea el idioma que más se habla, o cuáles sean las páginas más pertinentes respecto a un tema según la óptica de una comunidad intelectual, ya que cada quién puede construir parte de la red y de su construcción.
2. ¿Hasta qué punto podemos tomar como cierto el argumento “La Web 2.0 es participativa”?
La Web 2.0 permite que todos podamos participar en la constante creación y estructuración de la Web. Características de la Web 2.0 como el Social Bookmarking, y la capacidad para adaptar los contenidos que creamos, apuntan en ese sentido. Sin embargo, la participación de la Web está limitada según el texto de Pedro Hernández mencionado por varias razones. Una es lo que se ejemplifica como la imagen del cometa. Hay unas grandes páginas de Internet que siguen marcando la pauta en cuanto al derrotero de la Web y lo que en ella se publica (son como la cabeza del cometa), y las creaciones de la gente del común son como los detritos que salen de esa cabeza.
Otra razón por la cual los contenidos de la Web son monitoreados y tamizados obedece a la calidad y la moralidad de los contenidos. Muchos usuarios de la Web publican contenido de muy poca calidad, o con informaciones simplemente falsas. O peor aún, contenidos moralmente censurables a la luz de una gran mayoría de legislaciones. En ese sentido creo positivo que haya límites a la democratización de la Web, ya que nadie quiere perder tiempo valioso topándose con información inútil o incluso ofensiva.
3. ¿Cómo se evidencia y cómo se puede aprovechar en el contexto educativo la “democratización” que pregona Web 2.0?
La democratización de la Web 2.0 se evidencia en muchas clases de contenidos que se pueden compartir con muchas personas y modificar según consideremos, dando rienda suelta a nuestra creatividad, talento y bagaje intelectual. Por ejemplo, en el caso concreto de la enseñanza del inglés se habla mucho del Cooperative Learning en el entorno de clase, el cual es un enfoque operacional que busca que los alumnos se ayuden mutuamente en las distintas actividades, trabajando en un equipo en el cual cada uno tiene un rol para lograr una meta común. Y esa característica ideal del entorno de clase se facilita mucho con las herramientas de la Web 2.0.
En el entorno educativo esto se ejemplifica por ejemplo con actividades como la creación de Wikis y el intercambio y análisis conjunto de Blogs.
4. ¿Son útiles las herramientas Web 2.0 para la creación de actividades de aprendizaje pertinentes en ambientes virtuales?
Pienso que sí son útiles, ya que, por una parte, motivan mucho el estudiante en la medida en que ellos logran un producto que es una creación suya. Es el caso por ejemplo de varios estudiantes que he tenido, quienes comparten sus blogs académicos con amigos que no son de la institución.Pero por otro lado, hay que enfatizar mucho en los ambientes virtuales en el aspecto de la pertinencia de los contenidos. Estos deben tener claridad, calidad y observar ciertos aspectos evaluativos según los cuales los objetivos siempre estén presentes, tanto para el alumno como para el docente.
5. ¿Cómo se puede promover en la educación a distancia la “creación social del conocimiento”?
Creo que una mejora en la educación a distancia puede pensarse si se aprovechan las características útiles de la Web 2.0 y la creación social del conocimiento de la que hemos venido hablando. Siempre se ha creído en algo que es como un lugar común en materia de educación: nuestros países están en una desventaja con respecto a otros porque el proceso de ilustración de nuestros pueblos está muy retrasado, y en materia ética somos como “menores de edad” en relación con otras sociedades. Pero por el hecho haber un proceso conjunto de creación del conocimiento, hay un espectro de posibilidades que desvirtúan ese rezago.
Pienso que la sola experiencia por la que un alumno socializa con un grupo su creación y producto intelectual, y no ya solo con un maestro que aprueba o reprueba sus ideas, puede considerarse como una forma de diálogo en la que todos hacemos un ejercicio de pensamiento crítico. Y en ese sentido las instituciones deben usar los productos que se construyen durante el proceso educativo como un medidor no sólo del quehacer, sino también de la pertinencia y calidad de la educación que se imparte. Así, los productos que dan en el entorno de la educación a distancia, como los foros virtuales, o las actividades en que los alumnos proponen textos y los someten a discusión, deben tener un impacto directo en las características de los programas.
Por otro lado, también deben pensarse estos productos de alumnos y docentes, como el lente bajo el cual se observan los conocimientos que nos llegan, de modo que se así se construya cultura.

No comments:
Post a Comment